El municipio de San Xoán de Río, considerado de montaña, está situado al sureste de Galicia y al noreste de la provincia de Ourense. Limita al norte con Ribas de Sil (Lugo); al este con los ayuntamientos de Ribas de Sil y de Pobra de Trives; al sur con Pobra de Trives y Chandrexa de Queixa y al oeste con Castro Caldelas.
Tiene una superficie de 61,7 kilómetros cuadrados y está formado por 59 núcleos poblacionales, integrados en nueve parroquias. La capitalidad del municipio está situada en O Campo, en la parroquia de San Xoán de Río.
El ayuntamiento se extiende desde la Sierra de A Moa hasta el río Navea, destacando además las elevaciones de O Seixo y la Sierra de Castrelo, con alturas superiores a los mil metros. Junto a A Moa y O Cerengo nacen riachuelos que, formando cursos de agua, recorren el municipio hacia el valle del río Navea.
En cuanto a la flora de la zona hay que destacar la coexistencia de arboledas con monte bajo. De entre los primeros destaca la fraga, bosque de grandes dimensiones en el que hay robles, castaños y otros árboles autóctonos. El monte bajo está representado por las retamas, carquesias y tojos.
Dentro de la fauna destaca la gran abundancia de jabalíes.
El clima es oceánico, debido a la elevada altitud y a la gran distancia que hay entre el ayuntamiento y la costa. La proximidad a Cabeza de Manzaneda ejerce una gran influencia en el carácter frío de la zona.
VALORACIÓN DEL JURADO
- El mayor valor de este ayuntamiento es su espectacular y virgen paisaje tapizado de frondosos árboles. Impresionante es la ruta de A Fraga, un bosque protegido de más de 116 hectáreas cubiertas totalmente por enormes bosques de castaños centenarios, robles, o alisos y con gran cantidad de riachuelos, cascadas y saltos como los de Pintasilva. Desde el mirador se puede disfrutar de la belleza del Valle de Navea en toda su extensión.
- Pero también destacamos el interés de la corporación municipal por mejorar, de hecho este año han recibido el Premio a Mejor Pueblo del Año Tecnológico y aspiran a convertirse en Capital Rural Europea. La incorporación de mobiliario urbano de calidad, y las plantaciones bajas, a modo de jardineras en las aceras son el comienzo de un camino hacia la mejora del entorno urbano.